El aceite de coco se extrae de la carne de coco seca o de la parte más interna, o se puede separar de la leche de coco. El aceite de coco contiene ácidos grasos de cadena media (MCFA) como el ácido láurico (54%), el ácido cáprico, el ácido caprílico, el ácido palmítico y mirístico y los ácidos grasos de cadena larga (LCFA) como el ácido oleico, linoleico y esteárico. No es perjudicial para caninos ya que como carnívoros natos los perros desde siempre comen ácidos grasos saturados como parte de su dieta diaria.

Beneficios:
• El aceite de coco, usado de forma tópica sobre la piel, tiene una larga historio como remedio natural para curar heridas. Además, un estudio publicado en el International Journal of Dermatology confirma que el aceite de coco ayuda en el tratamiento de la dermatitis atópica, una enfermedad crónica de la piel caracterizada por erupciones escamosas y con picazón.
• Efecto anti-lombrices. Se ha podido comprobar que puede eliminar lombrices en perros y gatos, de forma natural y sin efectos secundarios.
• Aplicado sobre el pelaje de perros y gatos el ácido láurico como componente principal del aceite de coco tiene el poder de mantener lejos a las garrapatas y pulgas.